El último proyecto del aclamado director Francis Ford Coppola se llama Palazzo Margherita, pero lejos de ser una nueva película, se trata de su quinto hotel. Tras el éxito de los otros (repartidos entre Guatemala, Belice y Argentina), ha decidido homenajear Bernalda, el pueblo natal de su abuelo, con este nuevo (y lujoso) hotel. Bernalda, en el sur de Italia, provincia de Matera, goza de un marco incomparable, pues está rodeada de playas vírgenes, casas históricas y antiguas cuevas. Si a este entorno sumamos la exquisitez del hotel, el resultado es de Oscar.
Palazzo Margherita era un viejo palacio de 1892. Coppola lo compró y reformó por completo, bajo la supervisión del diseñador francés Jacques Grange. Llaman la atención sus suelos de cerámica y mármol, sus techos llenos de pinturas al fresco realizadas a mano y la sofisticación de sus muebles. Cuenta con una cocina que fundamentalmente ofrece comida tradicional del sur de Italia. Y lo bueno es que no solo puedes degustarla, sino también aprender a cocinarla, pues la preparan en una mesa en la que los huéspedes pueden sentarse y disfrutar en vivo y en directo de su elaboración. Y si eres un apasionado del séptimo arte, cada noche puedes sentarte en su improvisada sala de cine: el salón del hotel se convierte en cine y proyectan películas de la colección personal del cineasta.
Parece que este Oscar es bien merecido… y eso que aún no sabíais lo de las sesiones privadas de yoga y pilates, los paseos en bicicleta, los baños en la piscina o los masajes con los que te puedes relajar…
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Foto | www.palazzomargherita.com