El viaje al Múnich más original

22/08/2014

Múnich, Alemania

Por si alguien no se ha enterado, Alemania está oficialmente de moda. Como flamante ganadora del Mundial, no se nos ocurre mejor momento para recrearnos en las maravillas que encierra. Hoy es el turno de Múnich, la bella capital bávara, pues más allá de las salchichas o la fiesta de la cerveza, hay que decir que Minga (como se la conoce en el dialecto bávaro) cuenta con los estudios cinematográficos más grandes de Europa, por eso es nuestro destino de cine del mes. Poned los móviles en silencio y que empiece la función.

Múnich. Bella y acogedora. Así lo confirma el lema de la ciudad, que no es otro que München mag Dich (A Múnich le gustas). Ella también nos gusta, así como a sus alegres habitantes, quienes constataron hace un par de años que es la ciudad con la mejor calidad de vida de Alemania. ¡Se dice rápido!

Múnich, arraigada como está en el sur de Alemania, es una urbe de cultura y tradiciones pero también es, para nuestro deleite, pura vanguardia. Para el que no la haya visitado nunca, le indicaremos que se prepare para recrearse, ya que en Múnich se pueden ver y se pueden hacer multitud de cosas. Sus 25 distritos atesoran la Alte Pinakothek, Neue Pinakothek, la Pinakothek der Moderne y Lenbachhaus, es decir, algunos de los museos más famosos del mundo, siendo el Deutsches Museum, dedicado a la ciencia y la tecnología, uno de los más visitados de Europa. Múnich es también una excelente excusa para disfrutar del teatro y la ópera, en joyas como el Teatro Nacional de Múnich, que alberga la Ópera Estatal de Baviera. Por último, cuatro destacados exprés de la ciudad serían: el Nuevo Ayuntamiento (Rathaus), con su popular carillón; la Catedral de Nuestra Señora (Frauenkirche), uno de los íconos de la ciudad y su techo, gracias a una ley que impide construir edificios más altos en el casco urbano y buena parte de las afueras; el mercado de alimentos (Viktualienmarkt), hoy día muy popular entre los amigos del buen comer y, en cuarto lugar, la visita al mirador de la Peterskirche, la iglesia más antigua de la ciudad.

Sin embargo, cualquiera que haya visitado esa tierra no dudará en afirmar que el principal atractivo de Múnich radica en sus gentes, muniqueses y muniquesas llenos de vitalidad y alegría. Para muestra, tan solo hay que adentrarse en una carpa durante la Oktoberfest (la célebre Fiesta de la Cerveza), para vivirlo y después relatarlo.

Aunque hablando del carácter de sus habitantes, una curiosidad que quizá no os cuenten las guías de viaje (y que explica mucho de su idiosincrasia) es el curioso fenómeno del Föhn. Se trata de un viento cálido y seco que magnifica la visión de los Alpes -situados a unos 70 kilómetros al sur- y que afecta al carácter de los muniqueses. Conviene estar preparado, ya que puede provocar una subida brusca de las temperaturas en pocas horas y en cualquier época del año.

Múnich, destino de cine

Pero estamos aquí para hablar de cine, ¿no? Se trata de darle un toque diferente a nuestras vacaciones en Alemania, para lo que arrancamos con una típica pregunta de Trivial: ¿dónde están las productoras cinematográficas más importantes de Alemania? Efectivamente, ¡están en Múnich! Si queremos ser protagonistas de una escapada original, conviene saber que visitar la Bavaria Filmstadt (o Ciudad del Cine), situada en Geiselgasteig (un barrio de Grünwald y suburbio de Múnich) es toda una experiencia.

Aunque este dato pasa desapercibido, hay que decir que Múnich cuenta con uno de los estudios cinematográficos mas grandes de Europa. Abiertos en 1919, por ellos han pasado personajes del celuloide tan celebres como Hitchcock, Welles o Wilder. En ellos, Alfred Hitchcock rodó su primera película, The Pleasure Garden (1925) y los estudios han sido utilizados por muchos directores, tales como Stanley Kubrick (Paths of Glory, 1957), John Huston (Freud: The Secret Passion, 1960), Billy Wilder (One, Two, Three, 1961), John Sturges (The Great Escape, 1963), Bob Fosse (Cabaret, 1972), Ingmar Bergman (The Serpent’s Egg, 1977), Robert Aldrich (Twilight’s Last Gleaming, 1977), Claude Chabrol y Wim Wenders.

Desde 1981 se pueden visitar a bordo de un pequeño tren. The Bavaria Film Tour es una atracción turística desde la que disfrutar de películas míticas como La historia interminable, entre otras.

Hasta aquí Múnich de cultura, gentes, cerveza y cine. ¿Te animas a volar con nosotros?

Foto: John Morgan

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