La nueva filosofía veg-friendly de Barcelona

08/02/2018

Hace unos años, Barcelona dejó entrever su firme propósito de comerse el mundo de manera natural, y fue entonces cuando muchos se empezaron a preguntar si aquel atisbo de intenciones alcanzaría su punto álgido. ¿El resultado? Que, hoy, la capital catalana se alza orgullosa como la primera ciudad veg-friendly del mundo. Todo esto ha permitido una adaptación a las nuevas circunstancias, también de cara al visitante, y lo ha hecho en todos los sentidos: gastronomía, educación y comercio son los tres grandes pilares sobre los que descansa esta nueva filosofía.

Y es que, si hacéis una búsqueda de restaurantes vegetarianos en Barcelona, multiplicaréis resultados frente a una búsqueda en cualquier otra ciudad española; la oferta gastronómica veggie, de calidad, es increíble. Recetas que aúnan tradición y modernidad, que le dan una vuelta de tuerca a los platos típicos de la tierra, y con versiones sin carne. Nuevos ingredientes, nuevos sabores que complementan a la perfección la riquísima herencia gastronómica de Cataluña.

También existe la posibilidad de formarse en alguna tendencia que respalde estas intenciones, que apueste hacia tendencias naturales y saludables: semana tras semana, la oferta de cursos, talleres, charlas y convenciones al respecto crece. Un buen ejemplo es la Veggieworld, que celebró en 2017 su primera edición y que, ante el gran éxito de público (más de 5.000 visitantes) y expositores, repetirá experiencia el próximo mes de octubre. Ya conocéis aquella dinámica que asegura que a mayor oferta, mayor demanda, y el interés por lo vegetariano ha aumentado de manera palpable en la última década.

Llegando al pilar del comercio… si buscáis establecimientos con productos de calidad, frescos y naturales, las opciones en Barcelona parecen no tener fin. Se está volviendo paulatinamente a la pasión por los productos a granel y recuperando la esencia del mercado de siempre, de toda la vida, donde comprar legumbres, hortalizas, frutas, verduras y lácteos casi de manera directa con el productor. ¿Dónde? Más allá de las pequeñas tiendas que emergen en los barrios más céntricos, como el Raval o Gràcia, en mercados municipales como el Mercat de la Llibertat es cada vez más fácil encontrar productos ecológicos y de proximidad.

Todo vuelve, está comprobado, pero lo mejor es que Barcelona ha sabido adelantarse a la tendencia. Viendo el éxito de esta filosofía, no descartamos que más ciudades se acaben uniendo a esta verde declaración de intenciones. Seguro que España cuenta no tardando con algún otro rincón tan veg-friendly como nuestra querida ciudad condal.

¿Alguien con ganas de un viaje veg-friendly en la sala? 😉

Foto | Pressmaster