Nuevo rima con Nueva York

13/03/2019

Iberia vuelo Nueva YorkMi primera vez en Nueva York fue por los pelos. Con 18 años, andaba yo muy entretenida con otras prioridades, y eso de irme de viaje familiar a la ciudad que nunca duerme me parecía un soberano rollo. Poco después, y gracias a uno de esos momentos de iluminación existencial que a veces nos acaecen, mi decisión cambió y, con ella, mi vida.

Nueva York alteró para siempre mi orden de prioridades, despertando mi mirada viajera. Desde que descendí de aquel avión en el JFK, lo de montarme en aeronaves para descubrir el mundo ha pasado a ser uno de los esenciales en mi camino vital. Así fue como nació mi pasión viajera: Nueva York fue el germen, ¡un motivo de lujo!

Nada como un vuelo lo más corto y directo posible para llegar frescos y aprovechar a tope. Para enamorarte de la Gran Manzana–porque eso es lo que pasará, irremediablemente-, te conviene saber que, con una ciudad como Nueva York, planear por adelantado sí es importante. Si te lo montas bien, y te reservas los días necesarios, puedes organizar tu escapada para explorar un barrio importante -y sus atractivos- por jornada o, si eres un viajero con brío, la fórmula puede ser aun más intensa: dar una vuelta por un barrio por la mañana y por otro por la tarde. La ciudad de Nueva York está llena de curiosidades: la casa más estrecha de la ciudad, en la que Cary Grant pasó alguna noche; la estatua de la libertad, que no es tan grande como parece (aunque no decepciona); o las pedidas de mano, bastante habituales a bordo de las barcas en el lago de Central Park. Conviene conocerlas y dedicarles tiempo.

Para una primera vez en Nueva York, lo suyo es mantener un estilo conservador de viaje: apostar por lo clásico, en esto caso, es más. Me refiero a que, aunque seas el viajero más arriesgado y rompedor del mundo, de esos que no quiere ni oír hablar de visitar lo típico, Nueva York bien merece, en ese sentido, una concesión. Times Square, el MET, el Empire State Building o Grand Central Terminal son todos lugares que debes ver una vez en la vida. Eso es así.

Otro consejo viajero es que mires y mires y vuelvas a mirar a tu alrededor. Los edificios, el cielo, pero, sobre todo, haz como James Stewart en La ventana indiscreta y no pierdas detalle de lo que pase junto a ti, especialmente de quién pase. Manhattan está plagada de famosos, de grandes estrellas: nunca sabes con quien te vas a cruzar por la calle.

El MoMA, un gran momento

MoMaEntre los clásicos que antes comentábamos, y en el apartado de grandes museos del mundo, uno que ocupa un lugar especial en mi corazón es el gran, el genunio, el inigualable MoMA. ¿Cómo no rendirse ante obras como La noche estrellada de Van Gogh, Marylin Dorada, de Warhol, o “Girl with ball” de Lichtenstein? La primera vez en Nueva York siempre se pisa el MoMA. De lo contrario, se estaría cometiendo un gran, gravísimo error.

Muchos son los que optan por encajar la visita coincidiendo con el día de entrada gratuita, al más puro estilo tío Gilito. ¡Yo misma lo he hecho! Entonces, conviene que te mentalices de que no vas a ser el único con esa idea, al contrario, vas a estar muy acompañado durante el recorrido por las salas. Con eso presente, la entrada al MoMa los viernes de las 16 a las 20 horas sí es un excelente truco para ahorrar un buen puñado de dólares en Nueva York.

Nueva York es lo más. El nuevo MoMA abrirá sus puertas el 21 de octubre de 2019, lo que significará más salas, más medios, más artistas y más de todo. Eso sí, se ruega paciencia. Con motivo de los preparativos y obras, el MoMA estará cerrado al público a partir del 16 de junio. Hasta entonces, el Museum of Modern Art sigue a tope, como siempre.

No te vayas del MoMa sin pararte en su tienda, una muestra micro de arte. Ya en la calle, a unos pasos del museo más moderno de Nueva Yorkverás un carrito de comida callejera que es un puesto de gyros para llevar. ¿Qué no sabes que son los gyros? Es una especialidad griega, una deliciosa carne asada que se sirve en un pan pita o sándwich. Suele haber cola para pedir, ¡por algo será! Si te lo topas, te conviene darle una oportunidad. Se trata de comida rica y barata, y será como en las pelis: te harás con tu ración, te sentarás en cualquier rincón cercano y, entre rascacielos, comerás en plena calle al más puro estilo “soy yupi y estoy de break”. Todo tan neoyorquino.

Con la mirada puesta en la primavera

Hudson YardsLa primavera en Nueva York viene cargada de novedades. La culpa es de Hudson Yards, un nuevo barrio en desarrollo que encontrarás entre la Calle 30, Avenida Doce, Calle 34 y Décima Avenida de Manhattan.

Este nuevo espacio de la ciudad es una amalgama de placeres. El recinto de Hudson Yards cuenta con infinidad de opciones para comer. Entre los nuevos restaurantes más esperados que llegan a la frontera occidental del municipio destaca el Mercado Little Spain de José Andrés, un paraíso de comida española. El espacio habría hecho muy feliz a Milón de Crotona, uno de los grandes glotones de la historia.

Tampoco faltan las tiendas, ni el arte. Aparte del componente “foodie” ya mencionado, uno de los momentos álgidos de la visita a Hudson Yards es “The Staircase”. La extraordinaria pieza estrella del nuevo espacio público es una escalera de caracol formada por casi 2.500 escalones y 80 plataformas, una vanguardista escultura concebida para ser escalada. Esta obra de arte interactiva ha sido ideada como punto donde las personas, por medio de un juego de ángulos, alturas y puntos de vista, pueden disfrutar de nuevas perspectivas de la ciudad. Desde ya tienes la oportunidad de hacerte con tu entrada, así que vuela con Iberia a Nueva York y descúbrela, que estás tardando.

En definitiva, Iberia quiere ponértelo fácil para que vivas tu primera vez en Nueva York, para que por fin te lances y te deleites con sus imprescindibles. Se trata de una urbe única en la vida, y queremos compartirla contigo. Vuela alto y sé feliz, que de eso se trata.

Fotos de Metropolitan Transportation Authority of New YorkjoiseyshowaaRalph Daily |Marita Acosta