Visitar Chicago es sumergirse sin flotadores en el american way of life. Puede que no haya una ciudad más americana que ésta: rascacielos que acarician las nubes, enormes parques verdísimos, todo tipo de razas en constante relación, mucha gente para cruzar por los pasos de cebra y omnipresentes reclamos que le incitan a uno a gastar dinero. Ésta es la idea: gastar, gastar, gastar. Pero entre compra y compra, deje hueco para admirar la grandiosidad de su arquitectura.
¿No hace mucho viento? ¿No? Es raro. La urbe tiene el sobrenombre de the windy city y con razón. En el downtown se suceden ejemplos de bellos edificios art decó con no menos estéticas moles de cristal y acero. The Magnificent Mile es un gran boulevard donde se encuentran esos gigantes inanimados, restaurantes para repetir una y otra vez y las mejores tiendas de ropa. ¿Ya se va a llevar la mano a la cartera? Espere, que antes hay que caminar por el loop, el centro del centro urbano.
La Sears Tower es la torre más alta de Norteamérica y la segunda del mundo, después de las Torres Petronas, en Kuala Lumpur, capital de Malasia. Mire hacia arriba y podrá comprobar que la estructura parece que nunca se acaba. John Hancock Observatory es el segundo rascacielos más alto de Chicago. Tiene cien pisos y en lo alto cuenta con un restaurante y un mirador desde el que se puede ver hasta 80 kilómetros a la redonda. 80 kilómetros y cuatro estados distintos, porque la ciudad se asienta junto al lago Michigan, compartido por los territorios de Illinois, Wisconsin, Indiana y Michigan.
La mezcla aquí es la seña de identidad: los arcos de medio punto del edificio Roockery, las rejas curvas y con formas vegetales del Carson Pirie Scott, el mármol verde del Carbide and Carbon Building, las formas neogóticas del Tribune Tower… Todo es a lo grande. Note el frescor del agua en la fuente de Buckingham, una de las principales atracciones, construida en 1927. Luego están el Planetario Adler (al lado de numerosas galerías de arte), el Lincoln Park Zoo (el más antiguo de Estados Unidos) y el Navy Pier. Este último lugar es el centro comercial y de entretenimiento más popular de Chicago, con un imponente cine para ver películas en 3D. Dejamos para el final el Millenium Park, con su Cloud Gate (la puerta de las nubes), una enorme habichuela de aspecto curvo donde verá reflejada la ciudad. Y todo (la ciudad, la vida, sus compras, usted mismo) le parecerá distorsionado.
Datos útiles:
- Chicago es la tercera ciudad de Estados Unidos y tiene más de 3 millones de personas, casi diez con su área metropolitana.
- El clima es continental: temperaturas bajo cero en invierno y mucho calor en verano.
- Como siempre cuando se viaja a Estados Unidos, previamente hay que rellenar un cuestionario vía online para acceder sin problemas como turista al país: https://esta.cbp.dhs.gov.
- Las propinas son voluntarias, pero es costumbre dejar entre un 15 y un 20% de la consumición.
- La moneda es el dólar.
- Iberia ofrece vuelos directos a Chicago desde Madrid, con una frecuencia de 5 a 7 vuelos directos semanales dependiendo de la época. Para encontrar los mejores precios, busque en www.iberia.com marcando «soy flexible en fechas».
Foto | dustinphillips