Madrid desde el cielo es igual de encantador que Madrid desde la tierra. Si no lo conoces todavía y tienes la oportunidad, merece la pena -siempre y cuando no le temas a las alturas :)- y si en tu plan incluyes niños, triunfarás y te reelegirán para que vuelvas a planear un día igual de entretenido. Y de esta manera, introducimos la segunda entrega de nuestra serie de posts dedicada a planes con niños en Madrid. Aquí estaba la primera entrega.
La mejor manera de otear la ciudad es desde el Teleférico. Inaugurado en el 69, desde entonces, la friolera de más de ocho millones de pasajeros lo han utilizado. No hay cálculos al respecto, pero seguro que muchos de esos pasajeros han sido niños. Y es que volar (alcanza una altura máxima de 40 metros) es una experiencia divertidísima y con la inconsciencia de los peques más aún. Además, es una buena oportunidad para que grandes y pequeños descubran rincones secretos de la ciudad, mientras escuchan las narraciones que cada cabina del Teleférico ofrece a sus visitantes. El paseo parte de Pintor Rosales y culmina en Casa de Campo. Ésta última cuenta con una terraza de generosas vistas, una cafetería con zona de juegos para niños y una zona de columpios en el exterior. Vamos, ¡no se le puede pedir más a un plan con niños!
Antes de programar tu visita, consulta horarios y sobre todo precios en la web, existen muchas alternativas, incluso como el Teleférico pertenece al grupo Parques Reunidos, existen opciones combinadas con el Zoo Aquarium o con el Parque de Atracciones.
Foto | urgetopunt
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