Samaná, el edén de República Dominicana

20/01/2015

Salto El Limon

Seguro que el nombre de Samaná evoca para ti pensamientos sugerentes. Ya sea exotismo, playas de escándalo o días de sol y buena energía, dirigir tus pasos hacia esa península es ir siempre en la dirección correcta.

Dicho esto, seguro que quieres que te contemos un poco más sobre lo que se esconde tras su nombre. Por eso, arrancaremos diciéndote que Samaná es una provincia de la República Dominicana y que sus encantos te aguardan al noreste de tan deseado país. La tierra de los samanenses es un tesoro natural y un lugar salvaje que le sentará genial al viajero independiente y sediento de aventura que hay en ti.

Como pasa con Santo Domingo, Santa Bárbara de Samaná (así se llama la capital de la provincia, aunque puedes llamarla simplemente Samaná) también tiene su puntito cosmopolita. Al abandonarla y adentrarnos a explorar los muchos atractivos de la provincia, en seguida descubrimos que en Samaná hay mucho que ver, empezando por su icono turístico y principal reclamo, que no es otro que el municipio de Las Terrenas, un paraíso playero de atmósfera relajada.

En Samaná encontrarás algunas de las mejores playas del mundo. Allí está playa Bonita, a la que también se puede acceder en una divertida excursión a caballo y donde al llegar, te recibe un pueblecito casi independiente, con apenas un puñado de casas, y con las aguas más transparentes y la arena más blanca que hayas visto jamás.

Otra gran maravilla es Playa Rincón. Rodeada de montañas y con un riachuelo de agua dulce que en ella desemboca, este lugar te deja con la sensación de haber arribado a la playa más estupenda del planeta. Para visitarla deberás dirigirte al distrito municipal de Las Galeras.

Tampoco hay que perderse la experiencia de pasar unas horas en Cayo Levantado. El trayecto en lancha desde el puerto de Samaná hasta la isla es ya una experiencia per se, un viaje dentro de otro viaje. Sentir cómo la brisa golpea tu rostro bajo el cálido sol del Caribe es un momento impagable.

En Samaná la aventura continua, ya sea rodeados de agua (recordemos que el destino que nos ocupa está bañando por el océano Atlántico) o transitando sus montañas (la provincia está en su mayoría ocupada por la Sierra de Samaná). Bahías, cascadas, montañas, vistas de infarto… Algo que no te debes perder es la visita a la espectacular cascada de El Limón, a la que se puede llegar a pie o a caballo, ¡tú eliges! Un auténtico edén rodeado de frondosa vegetación selvática y con el aliciente de poder darse un chapuzón en sus refrescantes aguas.

Si nunca has vivido la incomparable emoción de aguardar con sigilo que una ballena haga acto de presencia ante tu atenta mirada, tu oportunidad se llama Samaná. El invierno y el principio de la primavera (desde mediados de enero a mediados de marzo) es la mejor época para probar suerte y avistar ballenas jorobadas en acción.

Los amantes de los espacios naturales y del ecoturismo tienen una cita a ciegas con el Parque Nacional Los Haitises, la excusa perfecta para darle un respiro al sol y la playa y conocer más sobre la esencia de Samaná. Creado en 1976, su nombre significa “tierra de montañas” y, de hecho, es un punto idóneo para la práctica del senderismo. Viste calzado cómodo y sal a pasear, pues solo así podrás descubrir a fondo este increíble lugar y sus muchos atractivos, como son por ejemplo sus manglares. No en vano, dicen que este parque contiene la más grande muestra del manglar caribeño. ¡Aprovéchalo!

¿Y qué decir de su variada fauna? Un buen sitio para observarla en plena efervescencia y disfrutar de lo lindo es Cayo de los Pájaros. Como su nombre indica, aves como las tijeretas y los pelícanos sobrevuelan el lugar de manera casi permanente, ¡lo que se traduce en todo un espectáculo! Además, la reserva está llena de cuevas que contienen fascinantes pinturas de los indios taínos, como la de la Reyna, San Gabriel y La Línea.

Para acabar, ¿quieres que te confesemos cuál es el principal atractivo de Samaná? Como en el resto del país, la respuesta está en sus gentes. ¡No te pierdas República Dominicana!

Foto: Turismo de República Dominicana