Toledo es una de esas ciudades artísticas y culturales donde las haya y que podéis visitar en vuestro viaje a Madrid. Su zona monumental atrae a cientos de turistas cada año al igual que la obra de su ya por siempre querido Greco. Sin embargo su atractivo va más allá. Atraviesa museos y obras de arte para sentarse a la mesa de cualquiera. No es descabellado afirmar que la oferta gastronómica toledana es tan exquisita e impecable como la artística. De hecho, por algo será, que durante el presente año ostente el título de Capital Española de Gastronomía 2016. ¿O es qué las coincidencias existen? Repasemos algunas de sus opciones culinarias más recomendables y veamos:
- Restaurante Adolfo. El chef Adolfo Muñoz lleva la batuta en este local. La estancia de cinco años de Adolfo en Japón marca la esencia de su restaurante. En cuanto ojeamos la carta reconocemos esos aires nipones en la oferta de la misma. Pero ojo, sin descuidar ni un ápice la esencia toledana de toda la vida y teniendo muy presente lo saludable a la hora de elegir su modus operandi.
- Restaurante El Bohío (una estrella Michelín). El chef Pepe Rodríguez encabeza filas. Seguro que os suena gracias al fenómeno televisivo de Masterchef. Sin embargo estamos ante un restaurante con bagaje generacional -esta es la tercera generación de chefs que dirigen este antiquísimo local- en donde los sabores son tan intensos como tradicionales. Aunque, cuidado, utilizando siempre técnicas de vanguardia. Sus lecciones al lado del mismísimo Berasategui plasman la correcta ejecución de sus platos así como la constante búsqueda de la perfección en su cocina.
- Restaurante El Carmen de Montesión (una estrella Michelín). El chef Iván Cerdeño (discípulo directo de Pepe Rodríguez) cuida hasta el último detalle en su local. Sus platos ponen de manifiesto una colección de sabores tradicionales en consonancia con elaboraciones nuevas, llenas de matices diferentes que le dan un giro de 180º a su carta.
- Restaurante Tierra (una estrella Michelín). El chef José Carlos Fuentes está al mando de este establecimiento. Su cocina es ecléctica y novedosa. No es de extrañar. La formación de José Carlos es todo un popurrí de cocinas y de maestros: desde Ruscalleda hasta Japón, pasando por seis intensos años en Murcia. Atención a sus platos de mar y montaña de esencia nipona: toda una experiencia gustativa.
- Restaurante Musakaya. El chef argentino Javier Brichetto manda por aquí. Este local se ha ganado a pulso un reconocible puesto dentro del Mercado de San Agustín. La habilidad de Javier con las tapas tienen parte de culpa. La otra parte se debe a la fusión panasiática y panamericana que Brichetto lleva a cabo en su cocina. Aquí los sabores toledanos de toda la vida se conjugan a la perfección con sabores exóticos y estrafalarios.
Y bien, ¿las coincidencias existen? 😉 ¿O será acaso qué el saber hacer de estos chefs está detrás de ese nombramiento de Capital Española de Gastronomía 2016?
Foto | Jesús Dehesa