Budapest le gusta al cine. El cine le gusta a las personas. A las personas, les gusta Budapest. ¿Estamos o no estamos ante el triángulo amoroso perfecto? Una pasión que gira en torno al juego, por eso hoy te vamos a proponer que volemos juntos a la capital de Hungría y que nos explayemos. ¡Qué comience la diversión!
Jugar a las adivinanzas
Budapest habita en la gran pantalla hasta cuando no te das cuenta, sirviendo de camaleónico escenario a fotogramas y a infinidad de escenas. Porque, ¿acaso sabías que…
… Budapest fue Roma, París y Londres en la película Múnich, de Steven Spielberg?
… Budapest fue Buenos Aires en Evita?
… Budapest hizo las veces de Berlín Oriental en películas como Juego de Espías o La Deuda?
Ahora ya lo sabes: a Budapest le encanta disfrazarse de otros, así que sigue nuestros consejos y pásalo en grande cazándola en pleno juego de camuflaje.
Sincerarse en Budapest, plató de cine
Rara es la vez que Budapest se despoja de su disfraz y aparece como ella misma, siendo un ejemplo el excelente «thriller» ambientado en la guerra fría El Topo (2011). Dos de sus protagonistas, los agentes Jim Prideaux y Ricki Tarr, desarrollan sus sibilinas actividades de campo en la capital, principal lugar de filmación de la película. De hecho, el actor Mark Strong dedicó cuatro días a rodar la misión de Jim en Budapest, moviéndose como pez en el agua en el mundo gris y de cemento creado por los abundantes y singulares edificios de los años 70 con los que la ciudad cuenta. En definitiva: si todo esto te parece un galimatías, mira la cinta y todo cobrará sentido, ¡verás como querrás viajar a Budapest, su escenario de lujo!
Dejarse guiar por el Budapest con más séptimo arte
Opta por la opción cómoda: Varias son las empresas locales que organizan rutas por algunos de los lugares de rodaje que han aparecido en películas famosas. En ellas aprenderás muchas historias sucedidas entre los bastidores de algunas de las grandes superproducciones del cine a nivel mundial.
Escuchar las leyendas de Budapest
Cuenta el cuento que cuando el guionista de Underworld pisó Budapest, se enamoró al instante de la ciudad. Según él, era el lugar perfecto para la película, citando atributos como “su atmósfera legendaria” o “su particular estilo gótico”. La cinta acabaría siendo filmada enteramente en Budapest, como pasaría también con Blade 2, La liga de los hombres extraordinarios, Van Helsing o Hellboy.
Exhibirse en festivales de cine
¿Has oído hablar del “Titanic International Film Festival”? Se trata del hermano mayor entre la amalgama de festivales de cine que llenan el calendario de eventos internacionales de Budapest. La edición de este año cerró el telón allá por el mes de abril pero ya se conocen los días de 2017. No lo dudes y toma nota de las fechas solicitadas: del 7 al 16 de abril del año que viene. Valdrá la pena.
Budapest atesora un buen puñado de salas de cine alternativas, como Uránia, Toldi, Örökmozgó o Puskin, excelentes lugares que sirven de sedes del festival. Déjate atrapar por las butacas de alguno de estos edificios cargados de magia e historia del cine y combina tus vacaciones en Hungría con sesiones de cultura y ambiente local en Budapest.
Pisar dos lugares de rodaje que abren telones de cine
Recapitulando, solo volando a Hungría podrás patear dos de los lugares de rodaje que casualmente ocupan las primeras escenas de algunas de las conocidas películas ya mencionadas, como Múnich o El Topo. Son escenarios para momentos soberbios y tremendamente impactantes, casi tanto como Budapest en sí misma: 1) el Estadio Puskás Ferenc, que hace las veces de recinto olímpico de Múnich en pleno asalto; 2) El encuentro entre Jim Prideaux y el General húngaro, que se rodó en el número 2 de la calle Petőfi Sándor. Merece la pena pasearse por esta avenida, a tan solo 5 minutos a pie del río, y fotografiar la espectacularidad de sus fachadas, como la de la casa Brudern o la de PALOMA Budapest, un lugar histórico, artístico y tranquilo plagados de tiendas donde dar rienda suelta a la buenas compras.
La perla del Danubio lo es por algo. Los directores lo saben, y utilizan esta joya a su antojo. Tú puedes volar y conocerla, hacer de topo por sus calles, impregnarte del gris de sus edificios, de sus fachadas bellamente decadentes. No pierdas la oportunidad de acercarte a un destino de cine como Budapest, te sorprenderá y te dejará con ganas de más. ¡Palabra de Iberia!
Foto| Lubomir Simek
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