Setúbal está de moda. A menos de 50 kilómetros de Lisboa -¡y menos de 200 kilómetros de España! El mapa marca 186 kilómetros a Badajoz- encontramos uno de los destinos más eco-chic del momento. ¿Eco-chic? Sí, sí. Y es que, como dicha palabreja indica, se trata de un destino en el que lo natural prima por encima de todas las cosas, pero sin perder un ápice del glamour más sobresaliente de los últimos tiempos…
El Parque Natural de la Arrábida y la Reserva Natural del Estuário del Sado tienen mucho que decir aquí. Setúbal no sería lo mismo sin las grandes contribuciones de estas dos zonas protegidas. Gracias a este parque y gracias a esta reserva, esta localización puede gozar de semejante prestigio natural.
El primero se trata de un parque situado en primera línea de playa. Impresiona el contraste entre el azul de sus acantilados y el verde de su vegetación. El abanico de playas vírgenes que la zona ofrece es además impresionante, por no hablar de la presencia de uno de los más raros ejemplares de maquis por aquí. Para saber más sobre la flora y la fauna en el parque, siempre se puede visitar el Museo Oceanográfico, localizado en el Fuerte de Nuestra Señora de la Arrábida.
El segundo es una reserva que debe su existencia al estuario del río Sado, que nace en la Sierra de Vigia y recorre 180 kilómetros de llanuras en dirección norte, culminando su trayecto junto a Setúbal. Y su estuario se forma cerca de Alcácer do Sal, resultando en un paraje húmedo caracterizado por los arrozales y los nidos de cigüeña. Además, hay que destacar la grandísima variedad de aves que sobrevuelan la zona -¡hasta 250 clases diferentes!- y la enorme presencia de delfines, en concreto del delfín nariz de botella.
Y, en cuanto a la definición de eco-chic, Comporta es la que en este caso tiene mucho que decir: se trata de una zona de Setúbal poco accesible, ya que sólo se llega en ferry atravesando el estuario del río Sado. Sus encantos de momento están poco explotados, y eso la convierte en un destino ideal para quienes buscan desconectar por completo y pasar desapercibidos durante sus vacaciones. ¿Y qué tiene Comporta para ser tan perfecta? Playas kilométricas, pinares verdes, casas blancas y azules, cabañas de madera y paja, una buena oferta gastronómica, un gran despliegue de deportes acuáticos, y privacidad. Y como no, mucho glamour.
Setúbal convence, ¿a qué sí? Y su definición como destino eco-chic… ¿verdad qué también? 😉
Foto | Paulo Valdivieso