Qué emocionada estaba antes de mi vuelo a Dakar, qué emocionada estaba ante la idea de aterrizar, de visitar, de respirar otros aires, otro continente. Y dentro de toda esa agitación, recuerdo reservarle un rinconcito muy especial a los días que pasaría recorriendo el exótico país Bassari, inmersa en el África más diferente.
Qué
En medio de las montañas de Senegal habita la tribu de los bassari, uno de los pueblos nativos más remotos del país africano. Visitar su territorio (los paisajes multiculturales de las etnias bassari, fula y bedik) es una buena alternativa para los que prefieren el turismo cultural y responsable, así como para los que ansían adentrarse en el África más rústico y aventurero.
Salemata es como se llama uno de los pueblos más importantes de la región del país Bassari. Este paraíso del turismo sostenible es una base de operaciones perfecta para emprender un breve trekking hacia la pequeña aldea de Ethiolo, envuelta en un valle paradisíaco. La rústica capital del país Bassari es conocida como enclave para ver los chimpancés en estado salvaje, además de por mostrar las tradiciones y los rituales de sus habitantes, la arquitectura de sus poblados y, en general, el estilo de vida que les caracteriza.
De camino a Salemata se encuentra Tambacounda, la ciudad más grande del este de Senegal, a 400 kilómetros al sureste de Dakar. Se trata de un cruce de caminos en el que se suelen pasar –al menos- unas horas; aunque no tiene un destacado gancho turístico, puede constituir una parada agradable y necesaria en la ruta que atraviesa el país.
Tras Tambacounda llega la región de Kedougou, un lugar tranquilo y con buena energía, a un tiro de piedra de su vecino: Malí. La mayor parte del camino que une Tambacounda con Kedougou transcurre por Niokolo Koba, el único parque nacional de Senegal, hogar de un buen puñado de animales salvajes, entre ellos leones, leopardos e hipopótamos.
Por qué
Son muchos los motivos para viajar a Dakar y, de paso, conocer el país Bassari. Véase:
Sus paisajes humanos. El país Bassari, con mayoría de etnia Peul (también llamados fula o fulani), invita al turismo sostenible y ejemplifica el África más rural. Una zona recóndita, poco conocida y plagada de pequeñas aldeas con gente hospitalaria y pacífica, muy al estilo de Senegal. En definitiva, un viaje muy singular.
Sus paisajes naturales. El país Bassari tiene mucho y frondoso verde, un entorno tan especial que entró en la lista como Patrimonio Mundial de la UNESCO. La llegada a la región de los países Bassari es una gran sorpresa; el verde de la selva es mágico, y bañarse en el río Gambia, un recuerdo memorable.
Cómo
Para moverse por Senegal por libre existen varias opciones, entre ellas el taxi y el alquiler de coches. Cuando los desplazamientos son largos, la segunda de ellas es la más recomendable. Dicho esto, los taxis son más baratos y para quien parta desde Dakar, la opción más sencilla sea quizá viajar en autobús.
Por lo que respecta a cómo visitar el país Bassari, los espíritus libres deben saber que lo mejor para sacarle el jugo es hacerlo de la mano de una agencia, pues así la experiencia será más inmersiva, tanto por el idioma como por el acceso a sus gentes, ingrediente clave de este gran viaje.
¿Cuándo?
(Espacio en blanco para que lo rellene el lector).
Fotos de US Embassy Dakar; Niels Broekzitter; Jeff Attaway