Si en los tiempos que corren Scorsese tuviera que rodar la adaptación de su archiconocida cinta Jo, ¡qué noche! (1985), bien podría titularla Jo, ¡qué año! Este atípico 2020 será, sin duda, inolvidable para todos, uno de esos pasajes vitales en los que la realidad bien parece superar la ficción. Un escenario diferente en el que el mundo sigue girando al ritmo de una ‘nueva normalidad’ que, con precaución y responsabilidad, por fin nos permite volver a volar, cada vez más y mejor (¡con lo mucho que a Iberia le gusta que lo hagas!).
¿Qué mejor momento para apostar por el viejo continente que ahora? Viajar por Europa es sinónimo de viajar con garantías; no en vano, este se asegura de que puedas sentirte seguro de vacaciones. Si además eliges un destino de dimensiones humanas donde todo está cerca, en el que el motivo es -entre otros- la cultura, un gran revulsivo ante la situación, entonces las ganas de viajar se ponen en marcha. Entra y sueña con Lille y sus atributos a pares, conecta con lo que de verdad emociona.
Lille, en Francia, cuenta en su haber con un pasado como capital europea de la cultura. Si a eso le sumas que en este 2020 diferente ha colgado en su particular pared de la fama el título de capital mundial del diseño, la intriga aumenta, ¿o no? Es la primera vez que una ciudad francesa es capital mundial del diseño, todo gracias a su uso innovador del mismo. Para saber cómo Lille lo está celebrando, y debido a las medidas tomadas en el territorio francés, te aconsejamos consultar la página web de los organizadores para cualquier actualización de eventos.
¿Y cómo es Lille? Esta joya desconocida de Francia, que responde al nombre alternativo de “Lila” en español, atesora atractivos a pares. Uno de sus principales lugares de interés es la Ciudadela de Vauban, cuya bella forma de estrella de cinco puntas resulta para muchos el lugar favorito de la ciudad. La fortificación constituye una auténtica ciudad militar dentro de Lila; conformada por edificios civiles y militares, que se distribuyen de forma concéntrica a la plaza de Armas, este punto emblemático de la ciudad es un espacio perfecto para ir a pasear y gozar del aire libre. Recorrerla en bici es lo más.
Siguiendo con los atractivos a pares, a nivel de museos destacaremos dos de los muchos que dan colorido cultural a la ciudad: el Palais des Beaux-Arts y Lille Metrópoli Museo de arte moderno, de arte contemporáneo y de arte marginal.
El Palais des Beaux-Arts de Lille es uno de los museos más imponentes de Francia, y el más grande del país más allá de los límites de París. En total, el museo presenta la segunda mayor colección de Francia después del Louvre, entre esculturas, pinturas, dibujos, cerámicas, y demás piezas artistas como Rafael, Donatello, Van Dyck, Rembrandt, Goya, El Greco, David, Toulouse-Lautrec, Delacroix, Rubens, Rodin, etc.
Para los amantes de la vanguardia, el Lille Metrópoli Museo de arte moderno, de arte contemporáneo y de arte marginal es el rincón imperdible de la ciudad. Situado en el parque público de Villeneuve-d’Ascq, el LaM es el único museo que te hará llegar de manera conjunta arte moderno, arte contemporáneo y arte marginal. Picasso, Modigliani, Miró, Braque, Léger y Calder son algunos de los nombres que podrás contemplar de cerca. El LaM está rodeado por un bello parque con esculturas que te permitirá tomar aire fresco y saborear lo visto y sentido. De hecho, en Lille abundan las actividades al aire libre.
Si te gusta la arquitectura, el par de visitas imprescindibles que te vamos a proponer en Lille son:
– La Maison Coilliot, de la que solo puede visitarse el exterior, pero cuya fachada constituye una parada obligada para los amantes del “Art Nouveau” (14 Rue de Fleurus).
– La Villa Cavrois, con un innovador diseño, el lujo modernista de los años 30, y numerosos muebles exclusivos (60 Avenue du Président John Fitzgerald Kennedy, Croix). A pesar del tiempo transcurrido desde su construcción, esta impresionante casa sigue siendo una villa vanguardista, un ejemplo único y singular, alejado del mundanal ruido, con amplios espacios, líneas rectas y un entorno magnífico.
Lille, situada entre París y Bruselas, se encuentra cerca de la frontera de Bélgica. Por tanto, constituye una cómoda escapada que se puede planear tanto desde Bruselas como desde la capital de Francia. El sueño de llegar a Lille es muy fácil de cumplir con Iberia: puedes volar al aeropuerto de Bruselas o al de París, más una hora en tren o en ruta en coche. Recuerda por favor que, debido a la situación actual, algunos de los lugares de interés de Lille pueden verse afectados. Como viajero responsable que eres, sabemos que visitarás las páginas de gestión oficiales para mantenerte al día.
Lo dicho: Iberia se compromete a llevarte a París o Bruselas con la máxima confianza y flexibilidad, para que te sientas seguro viajando . Lille es una excusa para sentirte bien, para descubrir Francia de otra manera, más pausada, más consciente, más responsable y, probablemente, más humana que nunca. Así podrás contribuir a que el mundo no pare, mientras haces eso que tanto te gusta: volar, visitar, experimentar.
Fotos de Franck Michel ; Carlos ZGZ; Maëlick; Fred Romer ; Jean- Pierre Dalbéra | Marita Acosta