Existen pocas afirmaciones que podemos recitar de manera tan convencida y sin temor a equivocarnos como que República Dominicana es un pedazo de cielo en la tierra, un oasis celestial que el azar quiso colocar en pleno mar Caribe para que descubriéramos a qué sabe el paraíso. No es casualidad, por tanto, que en los últimos años se haya erigido como un destino predilecto para muchas parejas recién casadas que desean dar rienda suelta a su nueva vida juntos; eso sí, si pensabas que vuestra luna de miel sólo podría girar en torno a una tumbona de playa y a unos cócteles en la arena, no hay nada más lejos de la realidad. Permítenos presentarte cinco planes alternativos para que vuestros días de vacaciones se conviertan en una experiencia que no olvidaréis jamás. ¿Estáis listos para hacer realidad vuestros sueños?
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Explorando las profundidades. La belleza de las costas dominicanas no radica únicamente a ras de suelo, sobre la superficie: sus fondos marinos, aún más espectaculares, si cabe, conforman el secreto mejor guardado de la isla. La perfecta visibilidad de sus aguas y su temperatura ideal durante todo el año permitirán que os mováis entre peces tropicales, contemplar de cerca coloridos arrecifes de coral y descubrir los misterios que esconden algunos barcos hundidos hace cientos de años. Las opciones para bucear o practicar snorkel son casi infinitas en cualquier punto del país; es más, que seáis expertos en estas lides o que todavía no hayáis disfrutado de vuestro bautizo submarino queda en un discreto segundo plano, pues siempre encontraréis una opción a medida.
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A vista de pájaro. ¿Buscas una forma original de conocer la República Domincana? ¿Qué tal hacerlo desde las alturas, surcando los cielos del Caribe? Y es que un vuelo en parapente os permitirá no sólo descubrir los rincones más exclusivos de la isla desde un punto de vista completamente diferente, también disfrutar de una sensación de libertad que seguro no habíais sentido hasta ese momento. Pura emoción y unas panorámicas que permanecerán guardadas en vuestra retina para siempre. Porque… qué mejor manera de juraros amor eterno que hacerlo desde las nubes. ¡Eso sí que es pasión!
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Una buena descarga de adrenalina. A pesar de su pequeño tamaño, la diversidad de paisajes existente en el país es uno de sus mayores reclamos de cara al visitante gracias la variedad de oportunidades que llega a ofrecer. Costa, montañas, cascadas, manglares, bosques y un buen número de piscinas naturales en las que podrás sentir la magia de un entorno único. Dirigíos hacia Puerto Plata, al norte de la isla, para descubrir los famosos 27 Charcos de Damajagua, unas fuentes de agua cálida que emanan desde el centro de la tierra creando un paisaje sólo apto para los más aventureros: es el enclave ideal para una buena ruta de trekking en la que tendréis que escalar por cañones, atravesar puentes hechos con soga y saltar entre barrancos para ir avanzando entre las piscinas. Será un plan alternativo sumamente emocionante, y más al vivirlo en pareja.
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En contacto directo con la naturaleza. Nadar abrazado a una mantarraya, sostener en tus brazos un simpático león marino o recibir el beso de un delfín mientras éste no deja de hacer piruetas delante de ti son experiencias fascinantes que no todo el mundo tiene la suerte de poder contar. En Punta Cana se encuentra el mejor delfinario de la isla, donde tendréis la oportunidad de convivir con estos sugerentes animales y verlos divertirse dentro de su hábtitat natural; os convertiréis en unos invitados de excepción.
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Un recorrido de lo más dulce. La Hacienda La Esmeralda, a sólo un par de horas de Santo Domingo, os tiene preparado un viaje especial por el más sabroso de los placeres: su plantación de cacao. Además de adentraros en el mágico mundo de esta milenaria planta para conocer el proceso de siembra y recolección de los granos, durante la visita guiada también seréis parte activa del recorrido al interactuar con los campesinos, preparar vuestro propio chocolate e, incluso, sembrar directamente vuestra planta. Por supuesto, también habrá espacio para una buena cata. Tendréis la posibilidad de diferenciar los diferentes tipos y conocer los secretos que han llevado a la República Dominicana a convertirse en el primer exportador de cacao orgánico del mundo.
Imágenes | © Ministerio de Turismo de República Dominicana } else {