Diez galardones y para casa. Así de satisfechos y triunfantes se retiraron los participantes en la génesis de la película Handia, una de las triunfadoras de los Goya 2018 (y que podrás disfrutar gracias a nuestra oferta de entretenimiento a bordo). La cinta fue rodada en Durango, una localidad del País Vasco muy cercana a Bilbao. Entonces, ¿qué tal si la descubrimos?
Handia (2017) fue uno de los nombres más coreados durante la pasada noche de los premios Goya; y eso que para la película no fue su primera velada de gloria, ya que previamente se había alzado con dos de los premios de Festival de cine de San Sebastián. Ahí es nada.
El rodaje de Handia se dilató durante 8 semanas y puso pie en distintas localizaciones del País Vasco; para la mayoría, el lugar más evidente para repasar la figura de Miguel Joaquin Eleizegi Arteaga sería su pueblo natal de Altzo, en Gipuzkoa, que con su ambiente rural, caseríos, bosques y prados es sin duda un destino de lo más sugerente. Sin embargo, nosotros hemos querido centrarnos en otro de sus lugares de rodaje, Durango, por eso de marcar la diferencia y aprovechando que el actor protagonista y ganador del Goya al mejor actor revelación, Eneko Sagardoy, es durangués.
Handia no es la única película rodada en Durango. El drama de intriga Cuando dejes de quererme (2018) contiene también escenas filmadas en esta histórica localidad. Parece que las ganador del Goya al mejor actor revelación para conocerla y visitarla se acumulan. Ay, ¿cuáles serán los atractivos de Durango?
Durango
Si Handia es la extraordinaria fábula de alguien gigante, Durango, como población más importante de Vizcaya que es después de las varias que conforman el Gran Bilbao, no le va a la zaga. Al pasear por su casco histórico, que conserva la estructura medieval con tres calles longitudinales y una transversal custodiadas en sus extremos por las iglesias de Santa María y Santa Ana, uno siente cómo se sumerge en una estética vetusta tan cuidada y deliciosa como la de Handia.
Uno de los lugares de rodaje es la Plaza Santa Ana. Entre sus muestras de arquitectura civil destaca el Arco de Santa Ana, único vestigio que se conserva de las antiguas murallas; construido en 1566 y restaurado en 1744 y 2017, es de estilo barroco. Un coqueto rincón curioso de de ver y fotografiar donde todo es bonito y cuidado, donde se respira una atmósfera histórica.
A unos pasos de la Plaza Santa Ana se encuentra el Palacio Etxe Zuria. Mandado construir por la familia Ampuero a finales del siglo XIX, su estilo ecléctico no deja indiferente: destaca por lo variado de los motivos ornamentales que la decoran, neoplaterescos, neorrenacentistas, neobarrocos o neobizantinos. ¡Todo un espectáculo! Situado en Pinondo, uno de los entornos más bellos de la localidad, el palacete familiar de Etxe Zuria fue en su día refugio en Durango del gran guitarrista Paco de Lucia, al ser propiedad familiar de su ex mujer. A modo de curiosidad, la galería modernista de la fachada, entre paredes decoradas con cerámicas de Daniel Zuloaga, era el lugar donde el maestro acostumbraba a sentarse a componer, tocar la guitarra y disfrutar de la magia autóctona.
La Muy Noble Durango, de apenas 30.000 habitantes, es una villa de lo más cultural. Su Feria del libro y del disco vasco de Durango (Durangoko Azoka), creada en 1965, se celebra durante la primera quincena de diciembre (este 2018 tendrá lugar del 5 al 9 de diciembre), y constituye una oportunidad para conocer de cerca la cultura vasca y respirar un poco de ese amor por los libros, los discos y demás cosas creativas.
Durango es el rincón de cine de Vizcaya que queremos que conozcas. Volando a Bilbao podrás acercarte a esta localidad que combina fábula y mística, tal y como percibió el propio Paco de Lucia. La mezcla, fuente de inspiración para cintas como Handia y otras que seguro están por llegar, merece premios y más premios. Nomina Bilbao como tu destino y piérdete hasta encontrarte.
Imagen | Jon Chica