La aventura de los senderos en Estados Unidos: información básica y consejos

28/09/2018

 

No hace falta decir que Estados Unidos es un país sorprendente, interesante e inagotable en cuestión viajes y buenos planes. Hoy volamos hasta allí para descubrir uno de esos apetecibles planes. ¡Atención los amantes del senderismo y de la naturaleza! Tomad asiento y relajaros antes de leer: la lectura de este post os dará unas ganas locas de subiros a un avión para… ¡emprender ruta! ¡Vamos allá!

El continente norteamericano puede presumir sin problema de tener una estupenda red de Parques Nacionales. Están muy bien conservados y su mantenimiento es excelente. Esto es posible gracias a diversas asociaciones que se encargan de mantenerlos siempre a punto con fondos tanto privados como estatales. Normalmente, además, detrás de estas asociaciones hay un sistema de voluntarios que trabajan para que nunca dejen de ser transitables. Debido a la gran extensión de Estados Unidos algunos se localizan en lugares remotos, sin embargo, todos suelen estar muy bien señalizados. Esta red es quizás uno de los factores que fomenta el amor del estadounidense hacia la cultura de montaña.

Hay tres senderos por excelencia, largos y con mucha tradición. No en vano, cuando logras recorrer los tres, además de convertirte en un auténtico Thru-hiker, se dice que has conseguido la Triple Corona. Estos senderos son: Pacific Crest Trail, Continental Divide Trail y Appalachian Trail. Si te animas, consulta en su web la mejor época para recorrerlos, las condiciones meteorológicas marcan el momento de hacerlo.

 

Y bien, llegados a este punto, es hora de comenzar a daros algunos consejos y trucos prácticos que siempre vienen bien.

Antes de emprender ruta:

  • Adquiere nociones básicas de orientación. Fundamental cuando se sale a la montaña.
  • Aprende a manejar una brújula.
  • Aplícate en la lectura de mapas. Lo necesitarás.
  • Equípate correctamente. Infórmate y apuesta por calidad antes que cantidad en cuanto al material que deberás llevar a cuestas cada día. Después de cada día, será muy importante el peso de tu mochila.
  • Infórmate respecto a los puntos del sendero en los que encontrarás agua. Esto lo puedes consultar bien en los mapas, bien en aplicaciones móviles como por ejemplo: https://itunes.apple.com/es/app/guthook-guides/id605447532?mt=8
  • Organiza los lugares en los que vas a ir parando a lo largo del sendero. Debes organizar tanto las paradas dentro del propio sendero, como los puntos en los que “saldrás a la civilización” para recargar comida y pilas en pueblos cercanos normalmente (los famosos zero days).

Durante la ruta. El material imprescindible con el que debes contar es el siguiente:

  • Una tienda de campaña ligera.
  • Un buen saco de dormir.
  • Una esterilla.
  • Bastones.
  • Un buen calzado de trekking. Nuevo pero probado. Ten en cuenta que si haces un sendero entero necesitarás hasta más de un par de zapatillas.
  • Una mochila lo más ligera posible.
  • Cambios de ropa para no más de tres días. Depende de cuando lo hagas, quizás te coincida un cambio de temporada y tengas que “cambiar el armario” ha mitad ruta. Por ejemplo, que comiences son ropa del desierto por el calor y que luego tengas que optar por ropa más abrigada a causa del frío. Esto es factible, enviando la ropa de cada estación por paquetería. A lo largo de todos los senderos hay puntos de recogida en ciudades próximas para estos envíos.
  • Unas chanclas. Airear tus pies al final del día es más importante de lo que imaginas.
  • Una toalla pequeña.
  • Una mosquitera y gorro para que tu cabeza vaya protegida (en algunas zonas y dependiendo de la época podrás encontrarte con muchos mosquitos).
  • Un depósito o camello para el agua.
  • Un filtro potabilizador para el agua.
  • Un hornillo de gas y recipiente. Esto es fundamental si vas a “comer caliente”. En caso contrario, puedes prescindir de ello.
  • Un pequeño botiquín.
  • Vaselina natural para proteger tus pies de ampollas y heridas.
  • Una pala para “tus necesidades”.
  • Papel higiénico.
  • Una bolsa para tu basura. En los senderos se sigue la filosofía Leave no trace. ¡Es muy importante seguirla!
  • Una brújula o GPS.
  • Mapas
  • Un Spot para estar siempre localizable. Recuerda que no siempre hay cobertura.

Además de este material también debes tener en cuenta lo siguiente:

  • Para poder acampar en los senderos, has de solicitar un permiso previo. Sin ese trámite, no puedes acampar. Hazlo con antelación en las webs de cada sendero.
  • Deberás hacer autostop. Dado que muchos de los senderos son remotos y están localizados en lugares de difícil acceso y el transporte público no alcanza esos puntos, hacer autostop es imprescindible y normal. Es una práctica segura y la gente de la zona está acostumbrada y es amable con los Thru-hikers. De hecho, se los conoce como los “Angels”. Recurrirás a ellos tanto al comienzo del sendero, como en las distintas paradas de descanso que tendrás que ir haciendo en pueblos próximos, cada 4 o 5 días.
  • En estas paradas -las de los zero days arriba mencionados- aprovecharás además para lavar ropa, comprar reservas de bebida y comida –resupply o abastecimiento-, darte una buena ducha y descansar en una buena cama. Tú decides el tiempo que quieres dedicarle a estos zero days, aunque lo más común es dedicarle un par de noches y un día entero. Es importante que sepas con antelación en qué lugares vas a parar para organizarte en base a eso también. Además, puedes enviar de antemano algo que vayas a ir necesitando a esos puntos.

Tras la ruta:

  • Experimentarás el síndrome de la montaña. Te agobiará un poco, pero pasará. No te preocupes, no eres el primero ni serás el último a quien le sucede esa necesidad imperiosa de seguir viviendo rodeado de naturaleza.
  • Necesitarás una recuperación física gradual, ya que al caminar muchos kilómetros al día tu cuerpo se resentirá.

Imágenes y texto: María José C. Lamas