Cuatro paraísos de Panamá donde combinar naturaleza y aventura

28/11/2019

 

En los recorridos previos que realizamos por Panamá hemos tenido la suerte de comprobar que el país centroamericano esconde increíbles rincones que han sido inmortalizados en la gran pantalla, que cuenta con una oferta gastronómica de primer nivel y, sobre todo, que ofrece una combinación inmejorable entre turismo urbano y turismo de naturaleza. De este último apartado queremos hablar hoy, de cómo Panamá se erigió hace décadas en una de las joyas del ecoturismo en el continente americano y, desde entonces, ha sabido modular su oferta turística para ofrecer al visitante una amalgama inmejorable entre naturaleza y deportes de aventura: contrastes únicos, infinidad de ecosistemas diferentes, una biodiversidad digna de mención; resumiendo, un destino perfecto para el turismo activo durante todo el año. ¿Nos acompañas en esta auténtica descarga de adrenalina?

 

 

Coronar el volcán Barú en una ruta apasionante de senderismo

Inactivo desde hace siglos (la última erupción se produjo hace alrededor de quinientos años), sus 3.475 metros de altura sobre el nivel del mar lo convierten en la prominencia más elevada de Panamá y también en el volcán más alto de América Central, dominando desde su atalaya privilegiada la Cordillera Central (arriba). Está ubicado en la provincia de Chiriquí, dentro de un parque natural al que da nombre, al oeste del país.

Esta subida al Barú es la ruta de senderismo por excelencia en Panamá, sobre todo por la riqueza natural de la que podemos disfrutar durante la aventura: las laderas del volcán están cubiertas por imponentes bosques nubosos que no se encuentran en ningún otro lugar del país y en los que te toparás con decenas de especies endémicas tanto de fauna (con más de 250 especies de aves como entre las que se encuentran quetzales o varias familias de colibríes, pero también iguanas verdes, mariposas o monos tití) como de flora (zeledonias, robles blancos o helechos). ¿Lo mejor? Las vistas desde la cima, desde donde podrás contemplar en los días más claros las dos grandes masas de agua que bañan Panamá, el Pacífico y el Caribe. Una espectacular panorámica de 360º.

Es posible iniciar el recorrido de senderismo tomando dos puntos de partida diferentes: desde el poblado de Boquete o desde el poblado de Volcán, ambos en las inmediaciones. La ruta no exige una gran destreza técnica, pero sí se recomienda cierta condición física para completar una caminata de entre cuatro y cinco horas (y otras tantas para bajar, claro está). Importante contratar los servicios de un guía, llevar agua y ropa térmica de abrigo, pues las temperaturas bajan de manera considerable conforme vas subiendo.

 

 

Canopy en Chiriquí

Es innegable que en los últimos años han adquirido gran protagonismo los vuelos en tirolina (canopy en Panamá), que en Chiriquí discurren por frondosa selva tropical (arriba), entre árboles centenarios y entre paisajes de inmejorable belleza. Allí, la mejor experiencia la podrás disfrutar en Boquete, al que acabamos de hacer referencia para la subida al Barú; y es que el volcán será uno de los espectadores de excepción que te acompañarán durante el recorrido: un canopy de 4,5 kilómetros de extensión que se dividen en doce líneas para crear el más largo de todo el país. Surcarás el cielo panameño entre 30 y 60 metros sobre el suelo, una aventura idónea para toda la familia.

Es una opción ideal para combinar naturaleza con una buena descarga de adrenalina, pues la concepción del enclave desde este punto de vista tan particular, como puedes imaginar, resulta impactante, y más cuando existe la posibilidad de combinar el descenso en tirolina con puentes colgantes, observación de aves desde puntos privilegiados o actividades de rappel; también podrás contemplar caídas de agua y de una gran variedad de vida silvestre. Una vivencia de esas que deben disfrutarse al menos una vez en la vida.

 

Snorkel y submarinismo en Boca Chica

Cualquier amante de los deportes acuáticos tiene una cita obligada en la pequeña pero encantadora población pesquera de Boca Chica, una de esas joyas aún semidesconocidas y que albergan una naturaleza sin parangón; no en vano, es la puerta de entrada al Parque Nacional Marino Golfo de Chiriquí: hablamos de más de 14.000 hectáreas de paraíso natural en las que encontrarás ecosistemas marinos de gran riqueza, entre manglares, pastos marinos o incluso un archipiélago de idílicas ínsulas que conforman el archipiélago de las Islas Paridas. Delfines, tiburones martillo, diversas familias de tortugas… y hasta ballenas jorobadas en la temporada entre agosto y octubre. Suena bien, ¿verdad?

Por todo ello, y aunque la oferta de deportes de aventura en Boca Chica es amplia, nuestra recomendación ante semejante diversidad ecológica es optar por el snorkel (arriba) y por el submarinismo para ver de cerca los increíbles fondos marinos: aguas de color turquesa, transparentes y cálidas durante la mayor parte del año, que guardan en su interior imponentes arrecifes de coral y bancos de peces de colores que le otorgan el toque exótico. Hay numerosas empresas con las que podrás contratar excursiones de un día que combinan playa, avistamiento de flora y fauna y sesiones de snorkeling en lugares increíbles, como Isla Gámez, Isla Bolaños o Islas Secas.

 

 

Un poco de kayak en la región de Darién

Seguimos recorriendo la costa pacífica, ahora en su parte este, para descubrir la bellísima región de Dairén: se trata de un destino que ha despertado desde hace décadas un gran interés biológico y natural para los especialistas y que poco a poco se va abriendo al turismo. No solo alberga el Parque Nacional Darién (declarado Patrimonio de la Humanidad y Reserva de la Biosfera por la UNESCO), el más grande del país, también el bosque tropical de tierras bajas de mayor extensión de Panamá. Amalgama de culturas gracias a una importante presencia de indígenas, Darién ofrece pura naturaleza virgen y preciosas playas de fina arena blanca con aguas cristalinas en las que se fomenta el ecoturismo sostenible. Playa Muerto, Fondeadero o Chorrito son algunas de las playas más conocidas de la zona.

¿Y qué deporte de aventura recomendamos practicar en Darién? Kayak, sin duda, para que puedas saborear con sosiego y quietud los imponentes paisajes. En la zona hay empresas locales que ofrecen tours personalizados en los que aportan los equipos y, si hay principiantes en el grupo, os explicarán cómo manejar la embarcación para que podáis moveros a vuestras anchas. Imagínatelo por un momento: tú, un kayak para flotar sobre el agua y el océano Pacífico en todo su esplendor. ¿Se te ocurre una mejor manera de enfocar tus vacaciones?

Imágenes | Autoridad de Turismo de Panamá