Ay, hacer y deshacer la maleta… Una obligación poco divertida en según qué ocasiones, pero necesaria para todo buen viajero. Pero tranquilo, porque existen algunas técnicas que mejorarán la eficiencia del proceso y te ayudarán a minimizar el tiempo que necesitas para esta tarea.
Como expertos en viaje, hemos recopilado algunas sugerencias y recomendaciones que harán del proceso lo más llevadero posible; pueden que, incluso, veas con buenos ojos el preparar tu maleta a partir de ahora. ¿No lo crees? ¡Atención a estos nueve consejos!
Procura no cargar demasiado
Sí, puede parecer una obviedad, pero siempre merece la pena recordarlo; y es que muchos de nosotros todavía intentamos llenar nuestras maletas con artículos de utilidad marginal o demasiadas prendas del mismo tipo. Es importante decidir qué meter o qué no atendiendo a la máxima utilidad.
Pero… ¿qué es realmente esencial? ¿Necesitas más de un vestido o de una camisa elegante? ¿Tan terrible sería volver a usar una prenda de vestir más de una vez? Dependerá de tu estilo de viaje, pues, cada vez más, los viajeros optan por pisos o apartamentos con cocina y, si tu alojamiento no tiene lavadora, quizá merezca la pena buscar alguno que sí la tenga. Es una forma de reciclar tu ropa durante el viaje y usarla lo máximo posible.
La importancia de enrollar o doblar bien
Cuando se trata de ropa, podemos elegir entre enrollar o doblar. La primera opción es especialmente buena cuando viajas con mochila, pero también se puede utilizar de forma efectiva en maletas, con el beneficio adicional de evitar arrugas al minimizar el aire atrapado entre la tela.
Para la segunda, cuando doblamos la ropa, nuestra recomendación es intentar doblar dos prendas juntas: coloca una y, luego, la mitad de otra sobre ella; dobla la de abajo sobre la de arriba y la de arriba sobre la parte doblada de la de abajo. De este modo, funcionarán a modo de cojín entre la ropa, algo que también ayudará a reducir las arrugas.
Lo que más pesa, en la parte inferior
Esto se aplica a pantalones, zapatos y chaquetas, así como a artículos que no son estrictamente de ropa, como kits de maquillaje, espejos o máquinas de afeitar. Esta decisión ayudará a reducir la ropa arrugada.
Usa tus zapatos como compartimentos
Los espacios internos de cada zapato o bota son muy útiles para almacenar artículos más pequeños y moldeables, como pueden ser calcetines o cinturones. Quizá no parezca mucho a simple vista, pero, dependiendo del tamaño de tu maleta, seguro que sirve de ayuda.
No guardes objetos de valor en el equipaje facturado
Para prevenir problemas en el caso poco probable de que tu maleta tenga alguna incidencia. Y hablamos no solo de joyas o productos electrónicos, también de documentos importantes. Te sorprendería la cantidad de viajeros que infringen esta regla sin saberlo, para luego arrepentirse. ¡No te conviertas en uno de ellos!
Guarda líquidos más grandes en el equipaje facturado
Dudamos en si añadir este, pero tampoco está de más recordar cosas obvias. Teniendo en cuenta las cuestiones de seguridad que se aplican en los aeropuertos desde hace años y que cualquier líquido en el equipaje de mano no puede superar los 100 mililitros, lo ideal es transportar este tipo de artículos en el equipaje facturado. Champús, acondicionadores… y también cualquier recuerdo líquido que adquieras durante el viaje, como vinos o licores.
Lleva puesta la ropa que más pese
Cualquier detalle cuenta y aporta. Para la ropa de abrigo o aquella que sea más voluminosa (que suele ser también la más pesada), intenta viajar con ella puesta para liberar espacio en tu maleta y así poder incluir otras cosas necesarias. Ayudará igualmente a distribuir mejor el peso. Obviamente, esto no aplicará en todas las situaciones y habrá que valorar de manera individual, pero en general suele ser de gran ayuda.
Embalajes cruzados
¿Qué significa esto de ‘embalajes cruzados’? Básicamente, se trata de incluir algunas de tus cosas en la maleta de tu pareja, y viceversa (y se aplica lo mismo cuando viajas con niños): de esta manera, si surgen inconvenientes con alguna maleta durante el viaje, siempre tendréis ropa para usar hasta que te la puedan entregar.
Prueba con las bolsas al vacío
Como comentamos más arriba, uno de los aspectos clave a la hora de hacer la maleta es minimizar el aire atrapado entre los artículos. Es posible comprar bolsas compactas para comprimir y compartimentar tu ropa y otros artículos al vacío, ahorrando espacio: puedes encontrarlos sin problema en internet, incluso algunos se venden con pequeñas aspiradoras para sacar la máxima cantidad de aire posible. Según mi propia experiencia, merece la pena intentarlo.
¿A que ahora lo ves de otro modo? ? Ahora ya solo queda hacer la maleta y…. ¡buen viaje!
Imágenes | martin-dm