Breve historia del mudéjar español, una arquitectura única en el mundo

18/01/2019

 

No se equivocaba el antiguo lema turístico que rezaba aquello de Spain is different. Y es que, quizá, nada distinga más a España del resto de Europa que los siete siglos de reinados musulmanes que se extendieron por la Península Ibérica desde el año 711 hasta el 1492; tiempo más que suficiente para dejar en el país una riqueza arquitectónica, artística y cultural tan sorprendente como exótica. Incluso, después de la desaparición de Al-Andalus la estética morisca ha seguido influyendo en la cultura española: el estilo mudéjar es el verdadero culpable. Acompáñanos, será como viajar en el tiempo.

Mudéjar Sevilla

Pero… ¿qué es el mudéjar?

Derivado el árabe Mudajjan (domesticado), este término acuñado en 1859 hace referencia a los musulmanes no convertidos que vivieron en la España posterior a la Reconquista y, por extensión, a la cultura creada por ellos; en particular, por los arquitectos y artesanos que construyeron y decoraron todo tipo de estructuras en zonas reconquistadas. A principios del siglo XIX se pudieron de moda estas adaptaciones neomudéjares en ciudades como Madrid. Incluso hubo claros de su extensión en algunos países de América Latina, como el famoso Arco del Carmen en San Cristóbal de la Casas, en México, o la Torre Mudéjar de Cali, en Colombia.

Mudéjar Sevilla

Aplicando formas y elementos islámicos a la arquitectura medieval y renacentista, el mudéjar se ejecuta principalmente sobre estructuras de ladrillo adornadas con mosaicos elaborados (arriba), aunque también se puede contemplar en yeserías, artesonados de madera y metales ornamentados. Son típicas las evocaciones a la geometría y la caligrafía árabe. En mi humilde opinión, no siempre resulta tan elegante como en sus antecedentes moriscos, quizá en parte por la acción sobre el ladrillo, aunque esto no impide que el mudéjar se haya convertido en un idioma hermoso; también en la contribución más típicamente española al ámbito universal de la arquitectura.

Mudéjar

¿Y dónde podemos encontrar el mudéjar?

Es un estilo con presencia en las principales regiones de España. Los primeros ejemplos de arte mudéjar, como las iglesias de San Tirso (abajo) y San Lorenzo, se remontan al Sahagún del siglo XII, localidad ubicada a media hora de la ciudad de León. Sin embargo, encontró especial profusión en las comunidades de Andalucía, Castilla-La Mancha (especialmente en Toledo) y en Aragón, cuya capital, Zaragoza, la ciudad de Teruel los tres valles que la rodean cuentan con la mayor concentración mudéjar del país, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

Iglesia de San Tirso

¿Y cuáles son los ejemplos más destacados?

Real Alcázar de Sevilla (detalle de mosaico, más arriba). Construido a lo largo de varias generaciones tras la Reconquista de Sevilla en el año 712, este gran palacio está abierto al público. Todavía lo sigue utilizando la familia real española cuando alguno sus miembros están en la capital de Andalucía.

Casa de Pilatos, en Sevilla (segunda foto superior). La construcción de este palacio renacentista y mudéjar comenzó en 1483, propiedad de los Duques de Medinaceli. Su imponente belleza le llevó a aparecer en diferentes éxitos de taquilla de Hollywood como Lawrence de Arabia, La conquista del paraíso o Knight and day.

Catedral de Santa María de Mediavilla, en Teruel. Su edificación comenzó en 1171 y duró varios siglos. Está considerado uno de los ejemplos más representativos de la arquitectura mudéjar en España.

Catedral-Basílica de Nuestra Señora del Pilar, en Zaragoza. Se cree que este impresionante templo con una arquitectura que mezcla los estilos barroco y mudéjar fue la primera iglesia de la cristiandad dedicada a la Virgen María. Además, es el hogar de una de las estatuas marianas más famosas de Europa.

Las iglesias de Santiago del Arrabal o Santa María la Blanca y la Sinagoga del Tránsito, todas ellas en Toledo, son claras exponentes del mudéjar en Castilla-La Mancha.

Imágenes:  arssecretafauk74PerseomedTyk y Zarateman | Max Pesling